CLARITY IS CHARITY (FATHER’S FAITH NOTES: APRIL 11, 2021)

You may have heard some discussion in the news recently about a statement from the Vatican concerning same-sex unions. The specific question centered around whether the Church could offer any sort of blessing to such unions. The explanation from the Vatican places the question in the broader context of what blessings are and concludes that “it is not licit to impart a blessing on relationships, or partnerships, even stable, that involve sexual activity outside of marriage (i.e., outside the indissoluble union of a man and a woman open in itself to the transmission of life), as is the case of the unions between persons of the same sex.” Note that unions between persons of the same sex are in no way being singled out or treated any differently from other relationships that involve sexual activity outside of marriage. Despite that, and though the statement simply reiterates the consistent teaching of the Church, it has been received with outrage by many who see it as hurtful or discriminatory.

I’d like to share with you another perspective, however, from an opinion article in the Washington Post (Drew Goins, “What the pope got right with his decree on gay marriage” March 19, 2021). The author, who identifies himself as a Christian with same sex attraction, clearly disagrees with the Church’s teaching. But he shares his perspective that being clear about the teaching is itself an act of kindness. He writes, “So when Pope Francis on Monday explicitly reiterated that his church would not bless same-sex unions, I respected if not the position, at least the frankness. Queer Christians deserve to know exactly what they’re signing up for when they consider a congregation, and cloaking a church’s policy on sexuality leads only to hurt.”

In his view, clarity is charity, and I tend to agree. While we must always express our faith with kindness and respect for all persons, it is not actually kind to pretend that we believe differently or that an immutable teaching is going to change. Authentic charity involves gently, and clearly, sharing the truth.

If you want to learn more about the Church’s teaching in this area, I encourage you to consult the Catechism of the Catholic Church paragraphs 2357-9. For more resources on how to communicate this truth with love, and to find faithful, Catholic support for people with same-sex attraction and their family members, please visit the Courage website couragerc.org. Courage, and its related group EnCourage, is a wonderful apostolate that faithfully proclaims the truth and accompanies people with support, prayer, and resources to help them live it. They are doing the good work of sharing the truth in love, with clarity and charity. May we all strive to do the same.

Have a blessed week,

Fr. Michael


Es posible que haya escuchado alguna discusión en las noticias recientemente sobre una declaración del Vaticano acerca de las uniones entre personas del mismo sexo. La pregunta específica se centró en si la Iglesia podría ofrecer algún tipo de bendición a tales uniones. La explicación del Vaticano coloca la pregunta en el contexto más amplio de qué son las bendiciones y concluye que “no es lícito impartir una bendición a relaciones, o a parejas incluso estables, que implican una praxis sexual fuera del matrimonio (es decir, fuera de la unión indisoluble de un hombre y una mujer abierta, por sí misma, a la transmisión de la vida), como es el caso de las uniones entre personas del mismo sexo.” Tenga en cuenta que las uniones entre personas del mismo sexo de ninguna manera se señalan ni se tratan de manera diferente a otras relaciones que involucran actividad sexual fuera del matrimonio. A pesar de eso, y aunque la declaración simplemente reitera la enseñanza constante de la Iglesia, ha sido recibida con indignación por muchos que la ven como hiriente o discriminatoria.

Por eso, me gustaría compartir con ustedes otra perspectiva, de un artículo de opinión en el Washington Post (Drew Goins, “What the pope got right with his decree on gay marriage”, 19 de marzo de 2021). El autor, que se identifica a sí mismo como un cristiano homosexual, claramente no está de acuerdo con las enseñanzas de la Iglesia. Pero comparte su perspectiva de que tener claro la enseñanza es en sí mismo un acto de caridad. Él escribe: “Entonces, cuando el Papa Francisco el lunes reiteró explícitamente que su iglesia no bendeciría las uniones entre personas del mismo sexo, respeté si no la posición, al menos la franqueza. Los cristianos homosexuales merecen saber exactamente a qué se están inscribiendo cuando consideran una congregación, y encubrir la política de la iglesia sobre la sexualidad solo conduce al dolor.”

En su opinión, la claridad es caridad y suelo estar de acuerdo. Si bien siempre debemos expresar nuestras creencias con misericordia y respeto por todas las personas, en realidad no es amable pretender que creemos de manera diferente o que una enseñanza inmutable va a cambiar. La verdadera caridad implica compartir la verdad de manera atractiva y clara.

Si desea obtener más información sobre las enseñanzas de la Iglesia en esta área, consulte el Catecismo de la Iglesia Católica números 2357-9. Para aprender como comunicar estas enseñanzas con amor, o encontrar apoyo católico fiel para las personas que experimentan atracciones hacia el mismo sexo y para sus seres queridos, visite el sitio web de Courage https://couragerc.org/?lang=es. Courage, y su grupo relacionado EnCourage, es un apostolado católico maravilloso que proclama fielmente la verdad y acompaña a las personas con apoyo, oración y recursos para ayudarles a vivirla. Están haciendo el buen trabajo de compartir la verdad con amor, con claridad y caridad. Que todos nos esforcemos por hacer lo mismo.

¡Que Dios los bendiga! P. Miguel